Islandia

LA TIERRA DE LOS DIOSES

Tras la llegada a Reikiavik comienza tu aventura visitando los puntos más emblemáticos de los alrededores de la capital en el conocido como Golden ring: geiseres, cascadas, paisajes volcánicos y el parque natural Þingvellir, este bello paraje donde los vikingos, primeros pobladores de la isla, se reunían en el primer parlamento democrático del mundo.

Más adelante nos sentiremos pequeños al contemplar el Heckla, un volcán con ciclos de erupción de diez años rodeado de una tierra yerma y de belleza solitaria. Podríamos visitar Landmannalaugar donde las montañas, fruto de pasadas erupciones, se cubren de un crisol impresionante de colores en un precioso paisaje devastado por ríos de lava y mantos de nieve y podremos disfrutar de un recuperador baño en unas piscinas termales naturales, o dirigirnos a Skogar con su imponente cascada donde termina una de las más bonitas rutas de trekking de Islandia.

Nos adentraremos en la naturaleza salvaje de la isla recorriendo la ruta que conecta Porstmork, (situado en el interior de la isla) con Skögar (en la costa sur) que toma salida desde Godaland (la tierra de los dioses) cruzando entre dos glaciares en tu camino, hollando las montañas más jóvenes del planeta, Magni y Móði, creadas en la erupción volcánica del 2010 que cubrió media Europa de cenizas durante días y acabando en Skogarfoss una de las cascadas más icónicas de la isla.

TRAS EL HIELO DEL GLACIAR

En la playa de Dyrholaey podremos contemplar una colonia de simpáticos frailecillos que revolotearan en busca de pececillos frente a nosotros; estas aves, con un aspecto entre un pato y un pingüino, a pesar de no estar incluidos en la lista de animales en peligro de extinción son solo avistables en lugares remotos como en el que nos encontraremos.

Tras disfrutar de estos curiosos animales visitaremos Mýrdalsjökull, el glaciar más grande de Europa, que descansa sobre varios conos volcánicos y del mágico lago helado de Jokulsarlon que el mismo glaciar alimenta en su perpetuo deshielo; los imponentes icebergs arrastrados por la corriente y varados en una playa de arena negra resultarán un espectáculo inolvidable. Con la siempre increíble luz de la isla y la singularidad de las formas de hielo en el lago glacial este será un paisaje extraordinario para el disfrute de los amantes de la fotografía. Podremos realizar un breve paseo guiado por el glaciar.

Recorreremos los fiordos del este de la isla donde podremos avistar algún cetáceo en sus bahías y nos adentraremos en el paisaje lunar de Myvatn, lugar donde dos placas tectónicas continentales se unen formando un paisaje de otro mundo, surcado de grietas en la tierra, conos volcánicos y lagos de azufre. ¡Podríamos asar unas salchichas para el almuerzo en las humeantes fumarolas de la caldera volcánica del Kafla!

No estará de más hacer una parada en el camino para darnos un relajante chapuzón en unas piscinas termales rodeados de un paisaje que parece pertenecer a otro planeta. Conoce la bahía de Husavik e intenta, desde la costa, avistar Ballenas azules y todo tipo de cetáceos en sus cristalinas aguas. 

FUEGO Y TIERRA

Recorre la isla hasta los desconocidos fiordos del noroeste y siéntete a un paso del círculo ártico, aquí verás adustos acantilados donde toda clase de aves marina anidan en millares cada verano, majestuosas colonias de aves y de focas que viven en este bello paraje apartado del mundo, descansa bañándote en sus piscinas termales admirando el deslumbrante paisaje.

Visita la península de Snæfellsnes una autentica paleta de pintor con amarillos sulfurados, verdes musgo, negros carbón y azules caribeños; verás inquietantes picos volcánicos, espectaculares acantilados y su singular volcán, el Snæfellsjökull, citado como el origen de “Viaje al centro de la tierra” de Julio Verne está coronado por una brillante capa de hielo.

Se va acercando el momento de despedirse de Islandia pero que mejor forma de hacerlo que conociendo la animada vida nocturna de Reikiavik tomando una copa o una cerveza en cualquiera de sus pubs viendo uno de los muchos conciertos en directo que se dan cita en la capital de la isla o relajándote una vez más en una de las muchas piscinas geotermales de las que los lugareños disfrutan, ojalá tengamos la suerte de que una aurora boreal nos despida antes de emprender la vuelta a casa.